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03 Abril 2023

Presentado el proyecto de rehabilitación integral de la Estación Enológica de Haro.

La presidenta del Gobierno de La Rioja, Concha Andreu, ha presentado esta mañana el proyecto de rehabilitación de la Estación Enológica de Haro en la sede de la institución centenaria, actuación que el Ejecutivo regional impulsará con inversión de 3,65 millones de euros en los que se incluye aportación de 3,65 millones de euros provenientes de fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. “Vamos a reformar profundamente estas instalaciones, respetando los edificios existentes y su integración en el entorno, para poner a la Estación Enólogica de Haro a la vanguardia internacional. Con recursos y ambición. Con un proyecto para el futuro”, ha asegurado Andreu.

En el acto han estado presentes representantes del sector vitivinícola como el Consejo Regulador de la DOCa. Rioja, bodegas y asociaciones de bodegas, así como ex directores de la Estación Enológica, junto a miembros del Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Haro. En él han intervenido la directora de la Estación Enológica de Haro, Elena Meléndez, y el arquitecto de la reforma, Alberto Pascual.

La presidenta del Ejecutivo regional ha recordado que “la Estación Enológica de Haro lleva más de 130 años siendo una referencia nacional en el ámbito vitivinícola con un enfoque innovador que se refuerza con tecnología puntera. En pocos lugares se hace tan real, con enorme beneficio para La Rioja, la transferencia de conocimiento entre el sector investigador y el sector productivo como aquí. Un referente con un horizonte ilusionante ante sí”.

A este respecto ha señalado que “ante la oportunidad extraordinaria que suponen los fondos europeos y el proyecto Enorregión, la Estación Enológica debe evolucionar y convertirse en parte del Campus Internacional del Vino, para que La Rioja sea un verdadero referente internacional en investigación vitivinícola”. 

Andreu ha destacado que “la Estación Enológica de Haro, junto al Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino y la Universidad de La Rioja formarán un gran complejo científico y un espacio común de investigación y formación excelente en el ámbito vitivinícola”.

La inversión de 3,65 millones de euros tiene como objetivos incrementar la capacidad científica y técnica de la Estación Enológica; mejorar los controles de calidad, seguridad y trazabilidad y potenciar su vocación de análisis, investigación, formación y servicio al sector vitivinícola en cuanto a determinar las necesidades del sector productor al analizar el vino frente a retos tales como la seguridad alimentaria, la exportación, el fraude o la trazabilidad de productos de calidad.

De los 3,65 millones de euros, 1,87 millones son provenientes de los fondos Mecanismo para la Recuperación y la Resiliencia, a través del Plan Complementario de Ciencia, con un 65 por ciento aportado por el Gobierno de España y un 35 por ciento aportado por el Gobierno de La Rioja, y 1,78 millones de euros proceden del Programa de impulso a la rehabilitación de edificios públicos (PIREP), con un 80 por ciento aportado por el Gobierno de España y un 20 por ciento por el Gobierno de La Rioja. 

Las actuaciones que se van a iniciar este mismo año en la Estación Enológica de Haro buscan transformarla y potenciarla al máximo. Estas actuaciones son parte esencial de una de las tres grandes áreas de trabajo de Enorregión: el impulso a la generación de conocimiento en torno al vino. El objetivo en este ámbito concreto del proyecto es fomentar la investigación, el desarrollo y la innovación puntera en vitivinicultura y promover su transferencia al sector y la Enológica desempeña a este respecto un papel fundamental.

Una reforma para una Estación Enológica del siglo XXI

El actual recinto de la Estación Enológica está ubicado en una parcela de 4.225 m2, en la que existen tres edificios. El arquitecto Alberto Pascual coordina la propuesta arquitectónica adjudicataria de la reforma que, partiendo del respeto a los edificios existentes, potencia y recupera un patrimonio arquitectónico con más de un siglo de vida y, al mismo tiempo, crea espacios accesibles, zonificados y funcionales, en un edificio sostenible y eficiente. Se pretende que cada edifico tenga un uso y una entidad propia, claramente diferenciable y accesible.

La calle central se plantea como elemento unificador de circulaciones peatonales exteriores, con un aspecto cambiante según las diferentes estaciones del año, mediante un emparrado que va cambiando de color y densidad, a modo de brisolei de protección.